sábado, 3 de octubre de 2009

¿Qué quieres que haga por ti?

Esta pregunta se la hizo el Señor a un hombre que no podía ver. El ciego llevaba tiempo junto al camino de Jericó, hundido en sus tinieblas, aguardando la luz. El desgraciado, al sentir el gentío, gritó pidiendo ayuda; Jesús detuvo su marcha y preguntó: ¿Qué quieres que haga por ti?.
Nunca en su vida ese hombre escuchó algo semejante. Ese pobre limosnero no podía imaginar que el Mesías le ofrecería su cercanía... que el Hijo de Dios estaría dispuesto a responder a sus anhelos... que sus oídos aguzados para oír las mas leves brisas iban a escuchar la voz del Verbo de la vida que le hablaba: ¿Qué quieres que haga por ti?
Con sencillez, ese hombre no pidió riquezas, prestigio ni triunfos; no pidió la honra. Sólo pidió ver. Sin embargo, detrás de esa palabra está la hondura de la fe. En el Evangelio «ver» es mucho más que mirar con los ojos; sólo ve de verdad el que es capaz de vislumbrar el misterio; el que descubre hacia dónde va su vida y encamina hacia allí sus pasos. En realidad sólo «ve» quien en medio de sus trabajos y sus penas descubre a Jesucristo. El que no llega a eso, aunque vea, conserva su ceguera.
Esa misma pregunta de Jesús resuena hoy en el coraazón de cada uno de nosotros, porque el Evangelio sigue vivo. El Señor es cercano y se interesa por nuestras necesidades y nuestros anhelos: «¿Qué quieres que haga por ti?».
Es hora de preguntamos qué queremos pedirle a Dios. Vale la pena reflexionar sobre nuestras peticiones al Señor porque eso manifiesta nuestras necesidades, nuestros valores y tal vez nuestros criterios más profundos. En los momentos de necesidad o de dolor nos volvemos a Dios para pedirle que venga en nuestra ayuda. Desgraciaadamente, a menudo sólo se pide dinero, salud o verse privados de un dolor.. pero allí no está la llave que permite abrir la puerta de la felicidad y de la Vida.
Si el Señor nos preguntara qué esperamos de él, muchos no sabríamos responder. Sin embargo, curiosamente cada día, con nuestros trabajos y desvelos, consciente o inconscientemente estamos respondiendo a esa pregunta. En realidad, ¿qué andamos buscando en este mundo?
Si en el momento supremo de la vida se nos concediera hacer tan sólo una petición; si en ese momento el Señor me preguntara qué quiero yo de él, ¿qué me atrevería a pedirle? Tendría que ser algo definitivo, algo que orientara el rumbo de la marcha. No podría ser algo pasajero.
En un momento así, Salomón pidió un corazón que supiera escuchar para gobernar a su pueblo.
Cuando Herodes, después de la danza seductora, ofreeció a Salomé todo cuanto ella deseara, la joven se vio connfundida. Entre sus veleidades, no sabía por qué decidirse, su vida estaba sin rumbo y terminó pidiendo la cabeza de Juan el Bautista. Perdió entonces su oportunidad.
No es fácil pedirle a Dios lo que realmente necesitaamos. Se trata de llegar hasta el fondo de nosotros mismos, de descubrir nuestro anhelo más hondo, de escudriñar nuestro interior para encontrar lo que da sentido a nuestras vidas; hacer claro qué constituye nuestra felicidad o qué fracasos nos causan las mayores penas. Ante esta pregunta de Jesús resulta indispensable interrogamos con mucha honestidad: ¿Qué quiero yo en verdad? ¿Qué deseo para los seres que amo? ¿Vale de verdad la pena lo que busco? ¿Qué estoy dispuesto a recibir de Dios?
El ciego de Jericó hizo una petición que agradó a Jesús: «Señor, que vea» (Lc 18, 41). A ese hombre sencillo, lo demás se le dio por añadidura.
Hoy domingo es la consagración de los niños a la Virgen de Fátima a las 10:00 de la mañana. Lleva a tus niños y niñas a que reciban lo que hay para ellos desde toda la eternidad. La cita es en el templo de Fátima. Te invitamos a ver en nuestra página web, www.jesusestavivo.org.mx la Misa del domingo de las 9 de la mañana en Catedral; la Misa del domingo de las 9 de la mañana en la Parroquia de San Pedro y en Las Rosas la Misa de Sanación. En Blooger tenemos nuestras seis columnas diferentes publicadas en los tres principales diarios de Morelia. La dirección para encontrarlas es: jesusestavivoenmorelia.blogspot.com También nos puedes localizar en Twitter donde están nuestras columnas, pero ahí puedes hacer comentarios, críticas, sugerencias y todo lo que se le parezca. Su dirección es: twitter.com/jesusestavivo
¡Alabado sea Jesucristo!
BUENAS NOTICIAS PARA EL HOMBRE DE HOY
Grupo Apostólico Nueva Evangelización

No hay comentarios: